Planes de verano, de excursiones, visitas a museo, tardes de cine y mucho más es lo que estas semanas de agosto disfrutan los niños, niñas y jóvenes que no pueden irse con sus familias. Y es que Las vacaciones en los Hogares de Acogida de Nuevo Futuro se organizan como una etapa más en el desarrollo de los niños, niñas y jóvenes en protección.
Planes del programa en positivo
Más del 50 por ciento de los niños, niñas y jóvenes que viven en los Hogares a lo largo del año no podrán volver con su familia, y si lo hacen, será durante un tiempo limitado, aseguran los responsables de la ONG. Aún así la sensación de descanso se cultiva y promueve con distintas medidas. Durante el verano las rutinas diarias pasan a un horario más flexible, diseñado para que quien quiera tenga sensación de desconexión, de veraneo y de comienzo de una etapa distinta. “Toca dormir un poco más, entretenerse con juegos, actividades, talleres y dinámicas distintas a las que se han venido realizando durante este curso escolar” explican los expertos. Y ahí está el equipo de educadores, dispuesto a aprovechar todas las ocasiones para transmitir enseñanzas y aprendizajes que les serán a los menores de gran utilidad para su inclusión social el día de mañana.
Aprender descansando
Las temáticas de las actividades que se realicen variarán, pero la motivación, educación y superación son elementos básicos de los planes y la agenda de este verano 2023 explican los expertos. Para aprender a convivir, a pasarlo bien, a gestionar las emociones, a empatizar a disfrutar de las pequeñas cosas, a reírse y descubrir lo positivo de cada cosa, no faltarán las excursiones y los espacios verdes, las visitas a museos, a algún parque de ocio, al cine y los talleres en en hogar.